Frankie DeLuca
Jeremy Miller sustituyó al gobernador. El problema es que no acepta sobornos como su predecesor.
Miller es una espina en mi costado, y no puedo encontrar nada sucio sobre él para usarlo en mi beneficio.
Pero hay muchas maneras de despellejar a un gato.
Me meteré a la fuerza en su vida y tomaré lo que quiera... cuando quiera.
Jeremy Miller
Frankie DeLuca está trastornada. Me atrevería a decir que lo más probable es que sea una psicópata.
Está loca, es apasionada y cautivadoramente despampanante, pero también es la Don de una familia mafiosa que campa a sus anchas por mi estado.
Nuestros valores no coinciden; ella no tiene brújula moral, mientras que yo defiendo la integridad, el orgullo y el respeto.
Mi misión es deshacerme de ella y de su mortífera actividad en los bajos fondos.
Pero cuando las líneas se difuminan, me resulta más difícil alejarme de la letal reina de la mafia.
Debería dejarla en paz, porque nada bueno puede venir por dar un mordisco a la fruta prohibida.
Pero esa fruta sabe tan malditamente dulce que no estoy seguro de querer parar.
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